En estas fechas no hemos podido resistirnos a hacer una breve reseña sobre el carnaval en la Edad Media.
Todo parece apuntar que sus orígenes se encuentran en las antiguas fiestas romanas conocidas con el nombre de saturnales, pero su origen tal y conocemos hoy día, o al menos similar, procede de la Edad Media.
Como término, carnaval, aparece por primera vez en Italia a
mediados del siglo X, carnelevare que procede del latín y que significa época durante la que se puede comer. En el siglo XII ya es
algo de lo que tenemos referencias en toda Europa.
El auge del carnaval comienza en el siglo XII. Ello es
favorecido por el aumento de la población, sobre todo en las ciudades, y los
estudiantes. Es la época de la implantación de las primeras universidades y
los estudiantes se van a convertir en un elemento dinamizador, fundamental, en
la celebración de los carnavales en muchas de estas ciudades universitarias
como Bolonia, París o Salamanca.
En la España del siglo XIII, esta fiesta era
denominada entroydo o antruejo en Galicia, carnestolendas en Castilla o iñaute
en vasco.
En el siglo XIV, en ‘El libro del Buen Amor’, del
arcipreste de Hita, asistimos a la célebre batalla entre Don Carnal y doña
Cuaresma.
Libro del Buen Amor
Arcipreste de Hita
Desde este siglo son comunes los desfiles de
personajes disfrazados y con máscaras, cantando temas satíricos e irónicos. También se celebraban juegos, banquetes, bailes y diversiones en general, con
mucha comida y mucha bebida, con el objeto de enfrentar la abstinencia
con el cuerpo bien fortalecido y preparado.
En el siglo XV la fiesta se introdujo en América, pero esto forma parte de otra época histórica que abordaremos en otro apartado de nuestro blog.
Un saludo.